El pasado fin de semana tuve el honor y el placer de organizar un taller de fotografía con la fotógrafa Magdalena Sienicka.
Como experta en fotografía infantil, desde mucho tiempo admiro su increíble trabajo. Algunos fotógrafos tienen solo un estilo único. Lo que siempre me ha gustado del trabajo de Magdalena es que puede ser inmensamente diferente: las imágenes a veces son efímeras y ligeras, y, a veces, oscuras y con mucho peso emocional.
Su arte es variado pero unido por una denominación común: su trabajo es emocional. Sus retratos son un puro reflejo mágico del alma de la persona que ella fotografía. Sus imágenes son arte porque son realizadas de una manera que a todas las madres les gustaría que fotografíen a sus hijos. Nunca usa el más mínimo maquillaje en los niños, ni sus accesorios son caros. Desea capturar el ´yo´ más íntimo de la persona que fotografía y lo logra mediante una comunicación suave y sutil a las modelos. Las guía suavemente a posar en lugar de posarles para lograr un efecto natural.
Aprendí una nueva configuración de luces que adoro y usaré en mis sesiones fotográficas de retratos.
También aprendí a editar imágenes en blanco para lograr una apariencia efímera que adoro especialmente para la fotografía de la Primera Comunión.
Echa un vistazo a las escenas detrás del taller y algunas imágenes increíbles que tomé durante el taller.
Contacta conmigo sin compromiso. Para una sesión fotográfica o para un taller de fotografía.
Mientras os invito a ver algunas imágenes ´backstage´del taller con Magda.
Un abrazo y buena semana!!!